...Llegaste en un sol de invierno
tras mis primaveras heladas.
Me tocaste de hielos tus lluvias profundas
y te quise...
como se quieren a tus mareas
en un día gris.
Te quise con umbría ansia,
de punta a punta
tras tus océanos de sueño.
Regresaste tiritando eneros en tus besos
y me diste estíos en tus manos,
porque yo no creía en la ventisca queda,
y que pudiera amar otra vez sus brisas salinas.
Es porque adoro tus vientos escondidos,
y me prometo cuidar tu silencio,
templar tu música... velarlo todo.
Voy a curar tu hermosa fiebre,
princesa de nieve.
Mi elixir serán azules cuentos,
bombones de risa.
Voy a sanarlo todo,
tus noches sin noche agolpadas.
La sal y tu herida se la llevarán nuestros otoños.
Hablas, orgullo.
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No tengo ganas de leer tanta poesía
de labios cansados de fracasar y
fracasar.
No tengo tiempo de pasarme la vida
pidiendo perdón por los errores
que tú t...
Hace 7 años
3 comentarios:
vaya hasta que apareces... y has dejado un poema muy lindo.. me ha gustado mucho! un poco de respostería como diría yo.. saludos! SABINA.
Gracias Sabina.
Cuídese.
El estilo característico de la poesía moderna es un tono de voz íntimo y un poeta contemporáneo que eleve su voz, sonará falso. Por eso tu poema me suena a presente, a verdad y a renacer personal. Sobre todo, amigo poeta, me quedo con:
y me prometo cuidar tu silencio,
templar tu música... velarlo todo.
esos versos me dan seguridad.
enhorabuena por convertirte en fénix, saltar de las cenizas y ponerle un tapón al pasado.
(a ver si hablamos en persona sobre el ritmo)
un abrazo.
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