(
Para M.R.F)
Nacer para esto.
Para ver como cae la nieve
sobre mis ojos de almendra amarga.
Pero tengo fe en los vientos,
la niebla, la lluvia
y que me lleven con ella.
Nacer para encontrar
sentido a la crecida de los ríos.
Que no se agoten en mí.
Me adentré en aquel
paraíso de frío cálido sinfín.
Como en casa.
Deseé no regresar
a los humos de la Ciudad,
a las ruinas de la muchedumbre.
Claustrofobia de llorar.
Sí, soy feliz cuando me acurruco
en tu vientre helado,
tus caricias de agua y neblina.
Todo fue
pulp fiction
de regreso en el taxi sin paisajes.
Mientras te lloraba y te reía,
me devolviste a tu sombra de vertiginosa alegría.
Te persigo siempre. Para poder respirar.